En algunos lugares la tierra sigue siendo la que era en sus orígenes, yerma, desierta y sin vida. Sin embargo, aquí es dónde encontramos la fuente de la vida, la sustancia que cubre las heridas de la tierra, sin ella, nuestro planeta estaría muerto.
La vida depende tanto de la sal como del agua. Lo que es necesario para todos los seres vivos se encuentra en nuestro planeta en grandes cantidades, a fin de que lo obtengan con el mínimo esfuerzo. El remedio al bienestar y a algunas enfermedades es indispensable que todos los seres vivos lo posean.
Sodio, Yodo, Flúor y otros minerales son la esencia de la vida en sus proporciones adecuadas.
Durante muchos años estos blancos cristales han provocado derrames de sangre, sudor y lágrimas de muchos humanos, esta sangre, sudor y lágrimas que contienen casi el mismo porcentaje de sal que el agua del mar.
La sal es un nutriente esencial para preservar la vida, sin la cual no es posible. Los seres humanos estamos compuestos de agua (50-75%) y su porción de sal oscila entre 14gr. en un bebé y los 250gr. en un adulto. El correcto funcionamiento del metabolismo, el transporte de nutrientes o la eliminación de sustancias tóxicas del organismo se realizan a través de los fluidos de agua y sal.
Respeto a las necesidades de la sal en la población son muy variables, difieren tanto de la salud como de factores externos. En climas calurosos o en actividades de alto esfuerzo se precisa ingerir más sal para evitar náuseas y calambres que se producen debido al aumento de sudoración y la pérdida de nutrientes.
No hay ninguna evidencia científica hoy en día que demuestre que la sal es perjudicial al ser humano. En el debate entre la sal y la salud hasta el día de hoy no se ha logrado un consenso científico al respeto.
La sal contiene en ella una virtud, un fuego que cuece y corrige todas las cosas, es la verdadera corrección de todo alimento. Lo que no está corregido entra en los humanos junto con la enfermedad. Cuando el alimento templado por la sal llega al estómago éste se regocija de digerirlo, de otro modo es imposible sin ella.
Está en la sangre de todos los seres vivos, si no hubiera una sal innata en ellos no podrían vivir, la necesitan y la encierran en ellos mismos, las plantas también.
Herbarium Scala Dei en los procesos alquímicos separamos y purificamos los tres principios de las plantas: SULPHUR – MERCURIUS – SAL . Son principios filosóficos que no tienen nada que ver con la Tabla Periódica.
En la destilación de los elementos, buscamos la extracción de sus cualidades, para que una vez separadas y recogidas, pueda obtenerse su quintaesencia.
Esta separación no puede hacerse sin el fuego, éste es el que reduce a la unidad todas aquellas cosas que son del mismo género y naturaleza y separa las que son de diversa.
La virtud de las cosas se halla oculta en su quintaesencia. Antes de ser extraída produce sus efectos mezclada con su materia o cuerpo.
Toda quintaesencia de cualquier planta tiene mil veces más virtud que la que poseía cuando se hallaba en su cuerpo material.
Es menester que Sulphur y Mercurius se desprendan de la materia que los contiene por la acción del fuego. Es un proceso de SOLVE ET COAGULA, se densifican y materializan SULPHUR – MERCURIUS – SAL, mostrando el Espiritus Mundi, el principio, lo más puro. La SAL es la encargada de la coagulación del MERCURIUS y la fijación del SULPHUR.
La SAL lo que divide en dos partes al símbolo – que significa la separación de las aguas de arriba de las de abajo, lo más puro de lo impuro. Conseguimos con estos procesos, de más de tres años, unos productos de gran calidad y altamente eficaces, regenerador del ser humano en todos sus planos.
La LUNA prepara al Ser a través de las esferas anteriores, para su coagulación, la esfera lunar, la más cercana a la Tierra, es la que marca el ritmo que el Ser sea <<dado a la luz del Sol>> en nuestro planeta. La esfera de la luna dará al hombre la individualidad consciente y lo dotará de cerebro, le enseñará a nutrirse con discernimiento (intestinos) y le proporcionará un sistema defensivo adecuado y suficiente para guardarse de las agresiones. Tanto las defensas como el sistema linfático y los ganglios son regencia de la Luna.
Ella, la LUNA , al ver que sus hijos enfermaban lloró de tristeza sobre la tierra,
y sus lágrimas se convirtieron en la sal del mundo, el Spiritus Vitae.
SOL – SAL – SALUD
